Nuestros compañeros de Genbeta ya explicaban hace más de cuatro años como Europa había agotado ya su cupo de direcciones IPv4, y la progresión del número de dispositivos conectados a la red de redes hecho que Norteamérica sea ahora la que se ha quedado sin estas direcciones que identifican de forma indivisible a cada uno de los dispositivos conectados.
El salto al nuevo IPv6 lleva produciéndose años, pero a pesar de ellos muchos se han resistido a migrar al nuevo estándar. La resitencia al cambio no podrá durar mucho mpas, porque solo África dispone ya de bloqueos de direcciones IPv6 disponibles. Éstas se acabarán en 2019, según las informan las estimaciones.
Las direcciones IPv6, preparadas para la Internet de las cosas
El nuevo sistema de direcciones Ip lleva desde 1990 y deja atás las limitaciones del anterios sistema, que parecía ir sobrado se creó en los años 70. ¿Quién imaginaría que habría más de 4.300 millones de dispositivos conectados? Con el direccionamiento de 128 bits de IPv6 el número de direcciones disponibles es astronómico (340 sextillones), y aunque es mejor se precavos, no parece probable que afrontemos un problema como el que tenemos ahora con las direciones IPv4.
La transición depende sobre todo de los proveedores de acceso a Internet, que ha tenido que realizar y seguirá teniendo que hacerlo la traducción de un espacio de direcciones al otro cuando el tráfico entre losnodos lo requería, y algunas corporaciones han acudido a una práctica curiosa: la de comerciar con paquetes de direcciones para poder seguir pudiendo vender este tipo de servicio a sus clientes.
El problema de se cambio a direcciones IPv6 reside como explica en Ars Tecchnica en el hecho de que muchas redes de datos simplemente no han habilitado este nuevo sistema, algo que aunque no es especialmente difícil, "tampoco es trival en grandes redes".
Todos los componentes de una red -ISPs, routers, cortafuegos, servidores DNS, balanceadores de carga, deben tener soporte para IPv6 y deben reconfigurarse para este propósito, y esa es una tare sobre todo engorrosa que las distintas entidades están tratando de aplazar lo máxmo posible. La situación actual de convivencia entre ambos sistemas se alargará aún cuantos años, y puede que el proceso se acelere si como todo parece esa Internet de las Cosas de la que tanto se habla se hace realidad.
Sign up here with your email
ConversionConversion EmoticonEmoticon