LA REGLA OHIO, UN MODO TRANSGRESOR DE ACABAR CON EL CAOS DEL EMAIL.


Cada correo electrónico debe leerse y gestionarse una sola vez, ésta es la descripción breve del método OHIO que promete acabar de una vez por todas con el atasco en el correo electrónico.

La de essayos y teorías que se habrán escrito en torno a la gestión del correo electrónico, y lo es cierto es que se hace absolutamente necesario tomar alguna medida para tratar de contener a esta bestia fuera de control. La angustia que se siente al abrir el correo y ver que el torrente de Mails no tiene fin es algo ya desgraciadamente demasiado habitual, y lo peor del asunto es que ya nos hemos habituado a una costumbre todavía más perjudicial: Volver a marcar como no leídos correos que ya hemos revisado.

Esto lo hacemos con la intención de "Luego lo revisó con más calma" o peor aún, por considerar que el asunto es tan importante que mejor dejarlo para última hora, del día. Este gesto aparentemente inocente hace que nuestro Inbox no deje de crecer, pero también que mentalmente tengamos la sensación de no haber terminado con algo,. Una regla viene a terminar con este círculos vicioso y es conocida  como OHIO.

Que nadie piense, que el nombre le viene por haber sido gestada e ese estado norteamericano, ni que se trata de un principio aplicado por algún gurú de la productividad: OHIO responde Only Handle It Once (gestiónalo una sola vez) y de refiere, lógicamente, el Email.

Su creador es Robert Pozen, un financiero EstadoUnidense que imparte clases en la Harvard Busines School y que se hartó de las múltiples teorías en torno a la productividad. En su obra Extreme Productivity planta cara a uno de los mayores agujeros negros en materia de gestion del tiempo: el correo electrónico.



El método OHIO es irreverente, pero acompañado de herramintas como Evernote, puede resultar la solución definitiva al atasco del Email.

Y si ya es asfixiante la sensación de tener que repasar esos correos  que hemos dejado para más tarde, peor aún es el lidiar con otro inesperado compañero de viaje que surge  de forma casi instantánea: La procrastinación. Esta palabra maldita en productividad induce al trabajador a ir posponiendo las tareas más engorrosas y atender las más fáciles, con la irreal sensación de estar siendo realmente productivos. Es como hacerse trampas en el solitario pero con consecuencias bastante más graves: Dejamos sin resolver o dejamos sin resolver o alargamos indefinidamente tareas de vital importancia, y lo peor es que lo hacemos por pura pereza.

Como hemos apuntado, los defensores de métodos de productividad más ortodoxos ponen en tela de juicio  la efectividad del sistema propuesto por Pozen, pero la realidad sugiere a rajatabla, no se pierde un sólo minuto en cuestiones improductivas.

El método OHIO esalternativo e irreverente, pero acompañado de potentes herraminetas como  Evernote, puede resultar la solución definitiva al atasco del Email. Y sin perderse en florituras teóricas.
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